martes, 15 de diciembre de 2009

Otro dia en el mundo...

Tenemos casas más grandes, pero familias más pequeñas.
Más comodidades, pero menos tiempo.
Tenemos más títulos, pero menos sentido común.
Más conocimientos, pero menos criterio.
Más medicinas, pero menos salud.
Hemos ido a la luna y hemos vuelto, pero nos cuesta cruzar la calle para conocer a los nuevos vecinos.
Hemos construido ordenadores que almacenan más información, pero gozamos de menos comunicación.
Nos hemos excedido en cantidad, quedándonos cortos en calidad.
Es la era de la comida rápida y la digestión lenta.
De hombres altos, pero de poco carácter.
De los grandes beneficios y las relaciones superficiales.
Es la era en que hay mucho en el escaparate, pero nada en el interior.

Hoy me he dado cuenta, que estamos avanzando de una manera un poco extraña. Tenemos a nuestro alcance miles de cosas para ser felices, y sin embargo,nunca nos parece suficiente. Y es que ya nada es tan de verdad, tan bonito ni tan natural.

Creamos nieve artificial
Conversamos menos. Chateamos más.
Decimos menos la verdad. Mentimos demasiado.
Desarrollamos el don de sacar lo peor de las personas. Y no lo mejor.
Falta confianza y bondad.
Nos conformamos en mandar abrazos y besos vía sms, en vez de darlos.
Somos menos nosotros. Pensamos más en el que dirán.
Corremos de los problemas, en vez de enfrentarnos a ellos.
Incluso decir "te quiero" resulta complicado.





* Si ALGUIEN me preguntara: ¿Qué te apetece hacer hoy? Le contestaría lo siguiente...

"CóGEME de la MANO y LLÉVAME a UN lugar DONDE PUEDA MIRAR LAS ESTRELLAS. No me pidas que hable, ni que piense...este es UN RATITO DE TRANQUILIDAD, en el que sólo me voy a preocupar DE RESPIRAR... de CONTAR LAS ESTRELLAS y de dejarme llevar".

Pero sé que eso, no va a ser posible. Suena demasiado bien.



Jugar al azar, y nunca saber donde puedes terminar.

No hay comentarios: