Gracias.

Hoy he recibido un regalo de Navidad muy especial y es este:

Dicen que no hay mal que por bien no venga. A mi me vino por duplicado. A cambio de partirme una mano, gané dos muletas para recorrer los trozos más pedregosos de un 2009 que, por fin, se termina. 24 años sin saber que, en el sur de la península estaban el hombro en el que he llorado los últimos tres meses y los ojos que devoran lo que escribo y que me lo devuelve escribiendo.

2009 para una deportista (ya retirada y que sólo me dedico al “tumbing” y el “sofing”, que también están muy bien) como lo fui, ha sido un año decente. 6 títulos para el Barcelona, el Deportivo en la parte cómoda de la tabla, Gasol con su anillo NBA y la ÑBA con su europeo de basket, el oro mundial de la sincronizada... Y podría seguir. Pero no hemos venido aquí a hablar de aquellos que salen en los periódicos, sino de dos campeonas anónimas.

Porque ganarse un corazón que parece blandito por fuera, pero que luego es una roca no es precisamente fácil. Se puede hablar con mil personas de tonterías. De bobadas. De lo que no importa. Pero contar los secretos más íntimos sólo se hace cuando se tiene la certeza de que se está hablando con la persona adecuada.

Os agradezco que me hayáis aguantado tantísimo. Que no me hayáis dejado tirada cuando más lo necesitaba. Que siempre estéis dispuestas a prestarme la atención necesaria del que se está ahogando. Porque con vuestras 4 manos, ya no tengo miedo de caerme y que me falten las fuerzas para levantarme.

Los últimos meses han sido jodidos de cojones, pero habéis tenido siempre un par de palabras para que me viniera arriba.

Sólo le pido al 2010 que os siga cargando de paciencia. Que me regale un par de días libres para poder bajarme a Jaén. Y otro par de ellos para vosotras, que Madrid también está bastante bien y a las copas invito yo (que ya tengo sueldo).

Si partirme la mano supone encontrarme a dos tías tan enormemente gigantes como vosotras dos, mañana mismo le pego otra hostia a la pared. La escayola es temporal; pero vosotras sois para siempre.

¡FELIZ NAVIDAD!

(y aunque no suela decir esto, me cuesta pronunciarlo: OS QUIERO)

El beso más fuerte del universo, pero por duplicado.

No me puedo sentir más orgullosa de que alguien como tú, que para mí es todo un ejemplo de: constacia,superación, disciplina, etc...Me dedique estas palabras a 300 km de distancia. Tú,una periodista increible, que conseguirá todas las metas que se proponga y más. Tengo que darte las gracias, porque me mandas abrazos para todos los examenes, y lo curioso es que desde que lo haces he aprobado todos. Me diste la mano para escribir, me dijiste que era buena e incluso te atreviste a empezar un "proyecto a medias" conmigo, el cual tengo abandonado pero prometo seguir en este 2010. En fin, una de esas personas de 1,50 metros que es grande por sí sola...de esas que si estas a su lado, lo mínimo que vas a conseguir es "aprender".